La mejor versión de Tito Rabat

Nuevo triplete español en el Mundial, una exhibición más del poderío de nuestro motociclismo. Marc Márquez se sacó en Silverstone la espina de su derrota de Brno en MotoGP y Álex Rins también del error de cálculo que tuvo allí al dar por ganada la carrera de Moto3 cuando aún faltaba una vuelta para que cayera la bandera de cuadros. Pero si tuviera que quedarme con un nombre propio de este GP de Gran Bretaña sería el de Tito Rabat, vencedor en Moto2, su sexto triunfo del año pero diría que éste el más trabajado. Era evidente que el líder de la categoría media no se encontraba nada cómodo con su moto en esta ocasión, sobre todo al principio le costó mucho seguir el ritmo de cabeza y parecía que la remontada se le ponía cuesta arriba esta vez.

En esas condiciones, lo fácil para Rabat hubiera sido mostrarse conformista, es un título lo que se juega y ya llegarían oportunidades mejores. Sin embargo, su planteamiento resultó bien diferente. A medida que su moto se aligeró se sintió más confiado y llegó el momento de lanzarse a por su compañero y principal rival. Mika Kallio parecía tenerlo todo bajo control, pero quizá no contaba con la evolución del catalán. Y Tito fue capaz dar alcance al finlandés y, más importante, ganarle cuerpo a cuerpo, un estilo que no es precisamente su fuerte. Otra muestra de la capacidad de progresión que tiene Rabat, el ejemplo perfecto de que es posible alcanzar la excelencia a base de esfuerzo y pundonor. Para mí, ya digo, el hombre del día en Silverstone.