24 fotos que no sirvieron para nada

Está bien eso de tratar de proteger todo aquello que haces. Si Luis Enrique considera que cerrando las sesiones el trabajo tendrá el éxito deseado, bienvenido sea silencio, debe pensar. Asimiladas las complicadas etapas de Van Gaal e incluso el histerismo de Guardiola en ese sentido, ya no viene de nuevo que alguien quiera hacer de los campos de la Ciutat Esportiva un bunker. Ahora, de eso a no explicar lo que realmente sucede, va un mundo. Para que lo entiendan: el club envió a los medios un paquete de 24 fotos, evidentemente elegidas a conciencia. En ellas, en las mandadas, la figura de Messi no aparecía ni una sola vez, algo que no extrañó a nadie el jueves, pero que ayer puso colorado a más de uno.

No cuesta nada decir lo que hay. Al final, la verdad siempre acaba imponiéndose. Por mucho que se busque, en los vestuarios o en las oficinas siempre hay gente de confianza dispuesta a explicar lo que sucede, sabedores, eso sí, del riesgo que corren y por mucha protección que siempre se le quiera dar a las fuentes. Que Messi esté tan recuperado es la mejor noticia que podía recibir el hincha culé, de ahí que no se entienda que se oculte y que no se informe debidamente.