Tengo grabado en mi mente un partido en La Romareda. Jugaba Alves de titular y Guaita era el suplente. Estaban calentando los porteros. Guaita calentaba a Alves. Pero en la grada los aficionados que se habían desplazado a Zaragoza animaban y coreaban el nombre de Guaita. Alves era el patito feo. Ya lo era para la prensa oficialista, que no es la oficial, ni la oficiosa; sino la que sólo sabe vivir a la sombra del poder y del populismo, o sea : a lo fácil. El niño bonito era Guaita y Alves el segundón.

Pero ocurrieron cosas. Unas dentro del campo y otras fuera. Para Amadeo Salvo su preferido siempre ha sido Alves. Lo sé porque me lo dijo a mi en persona mientras cenábamos. Luego llegó la presión de sus agentes con una oferta del Arsenal. El Arsenal vino a Valencia por Guaita , pero la oferta ,no. No ofrecieron nada. Para entonces Guaita ya se había despedido de sus compañeros en Paterna y se había llevado sus cosas de la taquilla. Luego tuvo que volver a Paterna con el macuto a la espalda( por no decir en otro sitio) de nuevo.

Después a Guaita le ocurrió un incidente por estar donde no debía. Una discoteca de playa, de madrugada en Oliva, donde se vio envuelto con su grupo, en una agresión que acabó en denuncia. Aquello se tapó porque era Guaita, pero el club sabía la verdad. Mientras tanto Alves seguía trabajando desde su disfraz externo de patito feo; pero confiando en él. Ni tenía a la prensa oficialista ni el favor de la afición. No era valenciano tampoco. Así que... difícil papeleta. Pero Alves acabó comiéndole la tostada a Guaita en el campo. Contra todo y contra muchos. Se ha ganado el uno , la renovación, el respeto y quizá la capitanía.