Siempre se critica a los árbitros por no ser valientes en las áreas. Cuando tienen coraje, más críticas para decir que se equivocaron. Para señalar una pena máxima hay que estar en el campo y decidir si la acción merece el castigo o no. Clos Gómez señaló el penalti de Cristiano y calló las bocas que siempre dicen que al Madrid no le pitan penaltis en contra y menos en el Bernabéu. Pero analicemos las jugadas más conflictivas.

En el minuto 13, Cristiano Ronaldo, controló el balón dentro de su área y cuando fue a despejar se cruzó Mosquera, que tocó el balón. El del Elche recibió una patada involuntaria y cayó. Existió el contacto y aunque fuera sin intención, fue falta. Penalti bien señalado. Además, acertó al no sacar la tarjeta amarilla. En el minuto 16, hubo una internada de Rodrigues por la banda derecha, Marcelo le zancadilleó y el jugador del Elche cayó dentro del área. Clos acertó señalando falta fuera del área pese a las protestas ilicitanas.

Fallo. Su error llegó en el minuto 26. Marcelo, en el lateral del área, pasó el balón hacia la banda y en ese momento Mosquera le tocó la bota. El brasileño marcó los pasos de la caída mal y tarde. Clos interpretó que era derribo y señaló mal el penalti. Acertó en no sacar la tarjeta amarilla por la zona en la que se produjo la infracción. En el minuto 79, Cristiano se internó en el área y Pasalic, infantilmente, le zancadilleó por detrás: penalti. Correcto.

Clos llevó bien el partido y sobre los penaltis, una advertencia: si los árbitros señalasen todos los penaltis que creen que se producen, los jugadores se lo pensarían en las áreas. Y esto lo digo desde mi butaca.