Ayer el Valencia jugó mejor que en Villarreal en el global del partido. Pero la diferencia fue que no ganó. Y en mi opinión mereció más ganar ayer que en Villarreal. Pero los análisis cambian mucho en función del resultado . Si ayer se hubiese ganado 2-0, euforia desmedida. Como no se ganó, se empezó a meter en la coctelera de los análisis la acumulación de delanteros y no de centrocampistas o el cambio de cesped.

La diferencia estriba sólo en el resultado. Ayer el Athletic pudo hacer una de las que le han acompañado al Valencia esta temporada. Si Alves no se encuentra sobre su pecho/cara ese último balón casi acabando el partido, podía hasta haber ganado el Athletic sin merecerlo, aunque con suerte.

Pero hoy quería hablar de Javi Fuego para reconocer un error. Cuando supe de su fichaje, pensé que era un jugador que al Valencia se le quedaba pequeño. Lo hablé con quien lo fichó: Braulio. Recuerdo que le dije: “Braulio esto es el Valencia y no el Depor“. Hoy, visto en perspectiva, me la envaino. Me la como gustosamente. Braulio acertó sin riesgo, porque además fue un fichaje gratis para ocupar el sitio de Albelda. Jugar con Fuego hoy es un seguro de vida. El Valencia se ha convertido casi en Javi Fuego y diez más. Felicidades a Braulio y a Fuego. Suspenso para mí.