Montero, Vargas y Austin lideran a los nuevos jugones

J. Montero. Una tarde en Quito destrozó a Argentina en las eliminatorias para el Mundial 2014 y ayer hizo pasar un calvario a Chambers. Exhibición del ecuatoriano y remontada del Swansea ante un Arsenal poco fiable. Jugador distinto.

Juventus. Allegri hace competir a Llorente y Morata por un puesto y de eso se beneficia la Juve. Con el puesto junto al fabuloso Tévez abierto, Llorente destrozó al Parma antes de que lo hiciese Morata. Dos goles cada uno en los siete que hizo la Juve.

Diego Costa. Gran partido el suyo, en el que desplegó todo su repertorio. Movilidad permanente, problema eterno para los centrales. Difícil pedirle más, y actuación envuelta en polémica por su ausencia de la Selección. Que Diego Costa está perfecto es obvio.

Henderson. Vigilancia al hombre a Fàbregas, igual que hizo Emre Can con Matic. Cierto que anuló bastante a ambos, pero tampoco le sirvió a un Liverpool inferior. No funciona el equipo red, y todos siguen esperando al primer gol de Balotelli en Premier.

Agüero. Rescató un punto para el City con su enorme talento. Dos golazos en dos acciones individuales que no ocultan los problemas de un equipo que sufrió ante un QPR que le superó en intensidad. Únicamente destellos de Touré en la segunda parte y los goles del delantero argentino.

Van Gaal. Cambió el dibujo y a jugadores de posición para dar con la tecla, pero no hay manera. Blind de central por las bajas, McNair a su lado, Mata salvador en la segunda parte y poco más. Además, Di María lleva varios partidos muy por debajo de su nivel.

Austin. Como siga a este paso va a ser jugador de selección. Cinco goles en cuatro partidos, movilidad permanente y capacidad de remate. Siempre en modestos, llegó desde el Burnley al QPR y ahora mismo es una de las sensaciones de la Premier.

Vargas. Uno de los fichajes de prestigio del QPR, siempre punta en aquella Universidad de Chile de Sampaoli, verdugo de España en el Mundial de Brasil. Jugador competitivo como pocos este Vargas, al que le queda pequeño el QPR y saldrá en breve.

Müller y Ribéry. El galo está en forma. Recuperado ya, arrancó en la izquierda, fabricó el primer gol y llega a tiempo. Müller se alejó de la posición de nueve pero acudió como siempre al área. Tres goles para uno de los futbolistas más desconcertantes. Un verdadero fenómeno.

El Shaarawy. Abrió el marcador con un golazo, y rompió una sequía de año y medio sin marcar. Entre lesiones y bajones de forma, el Milán no ha tenido a El Shaarawy y lo necesita en el momento actual del equipo. Casi rompe a llorar al marcar en Marassi, en una jugada clásica suya con cabalgada en la izquierda y remate con la derecha.