Las chicas de la Absoluta de fútbol marcaron en 2014 el gol de sus vidas: clasificarse para su primer Mundial, el de Canadá 2015. Recuerdo la primera vez que vi a Vero Boquete, líder indiscutible de la Selección, en Las Rozas. Me llamó la atención su gran calidad pero, sobre todo, su fuerza personal, capaz de transmitir en cuestión de minutos un mensaje arrollador, del que se ha ido contagiado toda la Selección. #SoñarEnGrande ha sido el hashtag de motivación que utilizan en Twitter desde su participación en la Eurocopa 2013 y el que les ha acompañado en la clasificación para el Mundial.

No lo tuvieron nada fácil y eso las ha hecho más fuertes. Vero tuvo que hacer frente, siendo niña, a una absurda prohibición que le impedía jugar al fútbol con niños. Algunas, como Ruth, reconocen haber escuchado el algún momento frases del estilo “Vete a fregar”. Y otras, como Vero, Natalia, Jenni, Vicky o Sonia han dado el paso de irse de España para crecer como futbolistas. Guiada por Ignacio Quereda, la Selección pide paso. Y lo hace de la mano de Ainhoa, Lola, Marta, Virginia, ‘Mesi’, ‘Torre’, Eli, Irene... Quédense con estos nombres. El momento de La Roja femenina ha llegado.