Tiene aún más pólvora el Madrid de la que ha mostrado. No sólo el gol ha de estar en pies de la BBC, sino de la aparición necesaria de la segunda línea. El factor sorpresa en botas de Isco y de Kroos puede resolver partidos con ‘esquinas’, como el que se anuncia hoy en Almería. Con el apoyo por detrás de Illarramendi, es día para que los dos volantes busquen el área rival e incrementen su corta cuenta goleadora en Liga: un gol por cabeza. Tienen más llegada, sin duda, como ya les hemos visto hacer con España y Alemania. En el Madrid es su cuenta pendiente.

Desconozco si Ancelotti prefiere que Kroos no tenga aventuras por la línea de ataque. No creo que piense así el italiano. Al revés, ante un rival que no conoce la victoria en su campo, el guión exige que el Madrid vaya arriba con todo, arrasando con los goleadores del cartel habitual, pero también con los ‘llegadores secundarios’. En ausencia de James, la inclusión de Illarra cambia el concepto para Kroos, que haría muy bien en apoyarse en la fantasía de Isco para formar una pareja perfecta de control y remate frente al Almería.