Pivote derecho. Lucas Silva saltó al campo en el 70’ por Illarra, ubicándose de pivote derecho. Sin embargo, se le observó su tendencia del Cruzeiro a jugar por el centro, lo que le llevaba siempre a pegarse mucho a Kroos desde el primer minuto. Él mismo se dio cuenta en alguna ocasión y rectificó volviendo a su lado, ya que el volante del Depor entraba suelto y Bale se veía obligado a bajar. Cuando entró Jesé y se jugó con 4-4-2, Lucas Silva se sintió más libre e incluso cayó por el lado izquierdo recuperando balón e iniciando jugada. El brasileño necesita ‘fijar’ su posición si Ancelotti le sitúa como escudero de Kroos por la derecha.

Corto recorrido. No se atrevió Lucas Silva a estirarse mucho. De los diez balones que tocó, sólo dos fueron en campo del Depor... Y apenas unos metros. Si Kroos se queda, él podría subir o a la inversa. Es un mecanismo que debe depurar.

Acierto en el pase. Un 80% de sus pases fueron buenos. Tocó con clase, con buena protección de balón (forzó una falta en este sentido) y gran salida de la presión del Depor, acertado en selección de pase. Aún tiene por mostrar sus fantásticos pases de cuarenta metros.

Activo. En 20’ dio diez pases y recuperó dos balones. Se movió mucho, pidió la pelota y tuvo presencia. Buenas maneras que le valieron el aprobado.