El único riesgo será disfrutar

La Comisión Antiviolencia ha decidido finalmente no declarar el derbi gallego como partido de alto riesgo. Es posible que sea este organismo quien corra el riesgo por esta controvertida resolución, pero a mí me parece una buena noticia. Ya va siendo hora de que cada uno sea responsable de sus actos y deje de ocultarse entre la multitud para ejercer su terrorismo callejero. La verdadera afición, tanto celtista como deportivista, quiere vivir un derbi en paz, con el único riesgo de disfrutar sin tres puntos.

Puede parecer una utopía, pero lo que la gran mayoría desea es tomar una cerveza vacilando al vecino, antes y después del partido. Llegar al estadio rival sin tener que ir camuflado, sin miedo a que una matrícula te deje desnudo a merced de unos desalmados que no saben ni lo que es un fuera de juego. Ya es hora de que esta minoría quede en evidencia y se aleje de los estadios. Es una gran oportunidad para inaugurar la concordia en el derbi gallego. En el amistoso disputado en verano en Pontevedra quedó patente la rivalidad más sana.

Esperemos que el domingo solo se hable de fútbol. Yo estoy convencido de que así será. Porque además hay mucho, y bueno, fútbol del que hablar. Depor y Celta llegan al derbi pletóricos de confianza y con un estilo de juego que les identifica. Es una identidad a la que no renuncian, jueguen en el Bernabéu o ante el campeón de Liga. El bloque de ambos conjuntos manda, pero el duelo personal también está servido. Lucas contra Nolito. Disfruten.