Kralovec no influyó en el resultado

El arbitraje del checo Kralovec fue en consonancia con el partido: no estuvo ni bien ni mal. Además, tenía que demostrar que está preparado para partidos de más intensidad. Por eso estuvo duro disciplinariamente, ya que tiene en su mano el seguir arbitrando Champions. No se guardó ninguna tarjeta y la verdad es que la expulsión de Tiago fue por dos amarillas correctamente sacadas, como en casi todas las que mostró en un partido duro e intenso pero sin calidad. No fue, sin embargo, la que sacó a Gámez ya que éste no tocó al jugador alemán. Las dos jugadas más conflictivas fueron un posible penalti, que no fue, por mano de Wendel, ya que el balón le dio en el muslo y después le rozó la mano pero eso no es penalti. La otra fue en saque de un córner en el 75’. Se anuló un gol a Torres pero acertó el asistente ya que éste hace una parábola, sale y entra en el campo. También acertó al amonestar verbalmente a Simeone porque no puede haber dos entrenadores en el área técnica.

Gol bien anulado. En el 75’ Kralovec anuló un gol a Fernando Torres porque previamente, en un saque de esquina el balón había salido, por muy poco, del terreno de juego.

Justa expulsión. En el 76’ también acertó el árbitro checo al expulsar a Tiago por una doble amarilla. En los dos casos estuvieron justificadas las tarjetas.