La fortaleza que da una vida dura

Iñaki Williams es el nuevo icono del Athletic, su esperanza negra. Y la de los 300 ghaneses de la provincia, que planean hacerle una peña. No renuncia a sus raíces: “Nací aquí, llevo 20 años y me siento vasco, pero los orígenes no se olvidan”. Miguel Jones no derribó la puerta por su piel, Benjamín Zarandona asegura que le dejaron tirado cuando iba a fichar... Llegó el siglo XXI y con él un pionero, Jonás Ramalho, que lo está haciendo de cine en el Girona y quizás se reúna con Williams el próximo año. El nuevo león lleva mal que le llamen negro por la calle. Sólo lo perdona en el campo, en el fragor de una batalla a la que es el primero en alistarse. Es ambicioso y ya sueña con montarse en la gabarra tras ganar al Barça.

Valverde sabe que teniendo a esta pantera en el campo el Athletic juega con una sexta velocidad al espacio y en la presión. Es lo que trató de lograr con Guillermo, otro del filial que corre que se las pela. Williams demostró mucho aplomo en la semifinal copera, todo un reto. No le salieron bien las cosas en la primera parte, pero no perdió los nervios y terminó como un tiro. Como dijo Etoo: “Voy a correr como un negro para vivir como un blanco”. Iñaki sabe lo dura que es la vida y esa es su gran fortaleza.