Desde la dura derrota frente al Barça en el nuevo San Mamés (2-5), la suerte cambió para el Athletic y todas las noticias son positivas en el bocho. Incluida, por supuesto, la última victoria en Eibar (0-1) en un ‘partido trampa’. El equipo de Valverde se ha recompuesto tácticamente, apoyado en la confianza de un sistema agresivo, de presión y arrojo sobre el territorio enemigo. Y esto al Madrid se le atraganta, como es de conocimiento general. O los blancos aprietan o en Bilbao se dejarán parte del botín liguero.

Puesto así el escenario, el foco alumbrará en el Athletic a la pareja Gurpegui-Rico y a Muniain, referente de este ejército. En el Madrid, se espera la reaparición estelar de Isco tras flojear ante el Villarreal. La potencia de Kroos, por supuesto, en funciones de capitán general de operaciones en la batalla por el balón. Y para la tercera plaza suena hasta Khedira, aunque no estaría mal echar a Lucas Silva a los ‘leones’ para que se vea obligado a reaccionar. San Mamés es sólo para valientes porque el partido se le va a poner crudo al Madrid, salvo que la BBC tenga un día de mucha puntería.