Desconcierto absoluto ayer en el Madrid. Caos de organización, de ideas y de fútbol. El equipo ayer tuvo actitud, sí, pero un desorden total. Los problemas defensivos empiezan a ser demasiado importantes como para dejarlos pasar. Quiero hacer hincapié en la posición de Kroos, donde hay un agujero. El rival disparó 20 veces. Un disparate. Muchas de ellas desde la frontal sin oposición, incluso con conducciones desde el centro del campo hasta prácticamente el área sin que ningún jugador haga la intención de robar la pelota.

El alemán no juega en su posición, ya lo sabemos, y sufre sin ayudas. Es incapaz de llegar a tapar todos los huecos ya que tiene demasiado campo que abarcar. Tampoco tiene esa vocación defensiva innata en otros jugadores más específicos de ese puesto de meterse entre los centrales y hacer coberturas cuando es necesario. Demasiados goles en contra han llegado por este problema y hay que solucionarlo con urgencia.