Sobran excusas y falta análisis

Nos quedamos sin ingleses en Europa. No hace ninguna gracia ver caer a equipos seguidos con tanta pasión, en los que trabaja tanta gente, en los que se maneja tanto sentimiento y dinero, con cuerpos técnicos que le dedican muchas horas a lo suyo. Pero si de ésta no aprenden, que se lo hagan mirar. Es verdad que, visto de cerca, cada caso es distinto. Pero hay elementos comunes que hace que esta debacle no sea del todo una casualidad. Para empezar, desde los foros oficiales, se han empezado a repetir las excusas de siempre: el calendario, la intensidad de la Premier, etc. Analizando la caída de los equipos ingleses, Phil Neville, por ejemplo, salió por peteneras: afirmó en beIN Sport que David Moyes le ha dicho que, con excepción de los cuatro primeros, el resto de conjuntos españoles son como equivalentes a la Segunda inglesa.

Sé que Moyes no ha dicho eso, pero, ¿qué tendrá que ver una cosa con la otra? Falta profundidad, criterio, análisis, autocrítica, y aceptar la más difícil de las verdades: están a años luz de la comprensión del juego de otros países porque les cuesta escuchar, aprender, abrirse al mundo. Traen extranjeros a la Premier para que jueguen como los ingleses, y han acabado teniendo mucho mejores jugadores que equipos. Los diarios se han llenado en los últimos dos días de duros análisis sobre el estado del fútbol inglés. Pero les falta una cosa: haberlo previsto. Es fácil hacer leña del árbol caído que, supongo, es también lo que acabo de hacer.