El Madrid debe defender hoy el prestigio ganado en Lisboa

El mundo entero se detendrá esta noche para ver el Barcelona-Real Madrid. El prestigio se gana, no se regala. Y gracias a la Décima y el 4-1 de Lisboa al Atleti, la pasión por la sagrada camiseta blanca creció como la espuma en los cinco continentes. El Barça fue una moda gracias a los años de Guardiola. Y como todas las modas, pasajeras... Pero el Madrid es eterno desde los tiempos irrepetibles de Di Stéfano, Puskas y Gento. Siempre estuvo ahí. Nunca se fue. Pero es innegable que la Décima hacía falta para sostener esa grandeza. No olvido que en mi niñez, a finales de los años 60, el Madrid le sacaba seis Copas de Europa al Barça (6-0). Medio siglo después, la vida sigue igual. Continuamos sacándole seis (10-4). Hay cosas que no cambiarán nunca...

Emociona ver el reportaje de mi compañero José Luis Guerrero. Desde la lejana Indonesia a Los Ángeles (¡grande Christian!), pasando por Australia o Rusia, todos se pararán delante de una pantalla de televisión para ver a sus héroes vikingos. Cristiano no les defraudará. Ni Iker, Carvajal, Pepe, Ramos, Marcelo, Kroos, Modric, Isco, Bale y Benzema. ¡Vaya equipazo!