Los dos secretos de Valentino

Muy interesante la entrevista conjunta que Valentino Rossi ha ofrecido a cuatro de los medios deportivos más importantes de Europa (L’ Equipe en Francia; La Gazzetta en Italia; Marca y As). Casi siempre lo son sus declaraciones porque se trata de un piloto especial, diría que único no sólo en la parrilla actual de MotoGP sino también en la historia de este deporte. Decir de alguien con su palmarés que es rapidísimo resulta tan obvio como innecesario; en mi opinión atesora otras cualidades que le distinguen del resto, los secretos de El Doctor que le convierten en extraordinario. El más claro es que disfruta, siempre ha sido así, con lo que hace y sabemos que ésa es la mejor fórmula para mantener la competitividad al máximo nivel.

La segunda virtud que destacaría de Rossi es una inteligencia superlativa. Su actitud desenfadada en realidad maquilla un talante reflexivo y calculador, nada escapa de su control y es capaz de encontrar soluciones a sus necesidades inimaginables para la mayoría. Su última genialidad pasa por entrenarse a tope con jóvenes pilotos, se rodea de ellos en su rancho y aprende de su estilo, de su mentalidad, de su actitud... ¿Por qué? Sencillo. Su objetivo prioritario no es otro que desbancar a un veinteañero, buscar su décima corona a costa de Marc Márquez, y así ha decidido descubrir cómo viven el motociclismo pilotos de esa generación e incluso algo más jóvenes. Con ellos recupera la frescura y, de paso, huye de cualquier tipo de inmovilismo.