El último año de tele en abierto

Arranca una nueva temporada del Mundial de motos, la segunda y última de modelo mixto de transmisiones televisivas. A partir de 2016 habrá que pagar por ver las carreras, sólo los cuatro grandes premios españoles se emitirán en abierto al considerarse de interés general. Un año después de que esta convivencia entre Telecinco (Mediaset) y Movistar TV se pusiera en marcha la polémica sigue muy presente entre los aficionados. Opiniones para todos los gustos y respetables, algunas de lo más variopintas, otras muy argumentadas y sin que falten las peregrinas pero casi nadie satisfecho por el rumbo que ha tomado la situación y que se dirige, irremisiblemente, al pago por visión. Este año tendremos ochos grandes premios en abierto... y se acabó.

Entiendo y comparto que a nadie le guste gastar su dinero en algo que hasta entonces había disfrutado gratis. El problema es que la coyuntura económica general y las exigencias del campeonato no dejan lugar a muchas alternativas. El promotor, Dorna, necesita explotar convenientemente su negocio para darle viabilidad; la televisión pública no puede asumir los derechos cuando sus arcas se encuentran bajo mínimos y las cadenas privadas no consiguen rentabilizar su apuesta por el descenso de la inversión publicitaria. Así que parece que la única salida posible es que cada uno paguemos por lo que nos gusta, sea el fútbol, la NBA, el golf, los toros, las motos o la Fórmula 1. El deporte gratuito, por desgracia, se encuentra en vías de extinción.