España vino a Sevilla justo antes de salir para el Mundial de Brasil. Fue para un amistoso contra Bolivia. Amistoso y Bolivia, reitero. La víspera de ese bolo el Pizjuán se llenó para ver el entrenamiento de La Roja. Al día siguiente no cabía un alma en el estadio. La Roja tenía un color y un sabor especial. Todavía era Campeona del Mundo. Todavía era la Número 1 del Ránking FIFA.

Ayer no se llenó el estadio. En el entrenamiento de la víspera contra Ucrania para un partido vital de clasificación para la Eurocopa de Francia apenas había dos mil personas... Oficial y Eurocopa, reitero. Es evidente el daño que los meneos que nos dieron Holanda en Salvador y Chile en Río han hecho daño a la Selección. Por eso se impone la renovación. Por eso Del Bosque ha hecho debutar a doce jugadores desde Brasil 2014. La Roja está en la tarea de recuperar la ilusión de los aficionados. Morata, Isco, Juanmi... ellos tienen ese bonito reto.