El equipo necesita aliento...

Con permiso del Clavo Ardiendo de Roncero y sus colegas, la afición del Real Madrid tiene claro que el éxito de la temporada pasa, en un alto porcentaje, por el Calderón. Después quedarán otros partidos importantes, pero el del día 14 a orillas del Manzanares ha cogido mucho vuelo fundamentalmente por tres motivos: la competición, el rival y el sambenito que persigue a Ancelotti y sus chicos de que no están siendo capaces de dar la talla ante los rivales más duros de pelar. Por eso el madridismo está volcado en un choque trascendental. Por eso se están rascando el bolsillo para intentar echar una mano a los suyos en una tarea complicada: hacer que el equipo que mejor está compitiendo en Europa en las últimas temporadas hinque la rodilla en su propia casa..

La afición blanca, de paladar fino, tiene ganada fama de exigente, pero también ha demostrado a lo largo de su historia que sabe perfectamante cuando es necesario que todos remen en la misma dirección y con un objetivo común. Desde que Sergio Ramos pusiera en pie a todos los merengues del mundo con su cabezazo universal, los de Simeone han mojado la oreja partido tras partido a los blancos ante la aparente pasividad de Carletto. Cerca de 3.000 tipos se dejarán el alma y la garganta en territorio colchonero para intentar que la racha cambie. Una semana después llegará el Bernabéu repleto para tirar de los suyos, pero el aliento en el primer partido de la eliminatoria será decisivo. Una vez más la afición más exigente del mundo vuelve a estar a la altura.