Juventud atlética al poder

A por todas. El Atlético sabe que en dos meses se jugará toda la temporada, tanto en Liga como en Champions. Puede volver a hacer historia o cuajar una campaña bastante buena. Y en el conjunto rojiblanco lo saben y no están por la labor de perder la oportunidad de hacer algo importante. En el campeonato, el reto es acabar entre los tres primeros, pues para la entidad, económicamente hablando, es vital. En el año de la renovación de Simeone hasta 2020, de la expansión internacional a través de convenios con diferentes clubes, de la compra de Wanda Group del 20 por ciento de las acciones, el equipo debe clasificarse sí o sí para la Champions. Por eso salió a por todas ante el Córdoba y se llevó tres puntos muy necesarios. El equipo duerme tercero, con la moral alta y a la espera de lo que haga hoy el Valencia.

Triunfo. El Atlético no ganaba un partido como visitante en Liga desde el pasado 31 de enero. Entonces derrotó con relativa facilidad al Eibar (1-3), en un escenario complicado puesto que el terreno de juego estuvo casi impracticable. En 2015 los del Cholo habían jugado a domicilio cinco partidos ligueros, con sólo esa victoria, dos derrotas (Barcelona y Celta) y dos empates (Sevilla y Espanyol). En Champions perdió en Leverkusen y en Copa cayó ante el Barça y empató en el Bernabéu. Por eso era vital que el Atlético dejara atrás esa mala imagen como visitante y sumara los tres puntos. De los nueve partidos que restan, cinco serán fuera. Ahí se jugará el Atlético el tercer puesto liguero.

Rotaciones. Ante el Córdoba no jugaron Miranda, por sanción, ni Raúl García, por lesión. Y Arda entró en el minuto 70 de partido. Quedan dos meses de competición y posiblemente pueda aparecer el cansancio en esta recta final de temporada. Por eso es bueno ir repartiendo minutos y esfuerzos entre todos. En este Atlético, además, no se regala nada y los que no son titulares han demostrado su categoría y su valía. Siempre es positivo que todos puedan tener protagonismo.

Juventud. En el once titular del Atlético formaron ayer Oblak (22 años), Giménez (20), Saúl (20), Koke (23) y Griezmann (24). Juventud, divino tesoro. Este dato quiere decir que el Atlético tiene equipo para muchos años y estos futbolistas, entre otros, tienen que ser la base de futuras plantillas rojiblancas. Estos jugadores tienen una calidad contrastada y ganas de comerse el mundo. Koke suma, además, el ser canterano y saber lo que significa el Atlético desde niño. Marcó Griezmann, la mejor noticia del partido. El francés no veía puerta desde el 21 de febrero, cuando hizo doblete ante el Almería. El galo es determinante y sus goles deben darle puntos a su equipo.

Estrategia. El conjunto del Cholo ha marcado 21 goles de estrategia a lo largo de esta temporada: 10 en saques de esquina, 10 en lanzamientos de falta y uno en saque de banda, el efectuado ayer por Gámez con prolonganción de Giménez para que marcara Saúl. Los saques de banda del lateral zurdo son ya un nuevo arma del Atlético a balón parado. Los rojiblancos han anotado 55 goles, con lo que estas acciones le han dado muy buen resultado.

En casa. El Atlético jugará el martes ante la Real Sociedad en el Calderón, donde el equipo se siente fuerte. Quedan nueve finales y delante de la afición los rojiblancos no suelen fallar. De momento, el Atlético ha vuelto a la normalidad, a ganar fuera y a ser un equipo fiable.