P. P. San Martín

Con Modric hubo luz; sin él, sombras

Plomizo el Real Madrid en términos globales, pero más gris aún cuando Modric tuvo que marcharse lesionado. Empieza a estar claro que la dependencia de los blancos de Modric es cada día mayor. Está trabajando por todo el campo, busca balón y lo entrega, empuja con determinación y ayer le hizo arrugarse a un Málaga que se ordenó de maravilla y que plantó mucha batalla. James también anda fenomenal y quizás Isco anduvo menos brillante que otras veces. Sin embargo, en el caso de Modric lo que se notó fue su ausencia, ya que Illarra no amedrentó al Málaga ni tampoco cubrió tanto campo, lo que permitió a Amrabat, Juanmi y compañía ganar metros y hasta marcar un gol en desajuste defensivo absoluto de los blancos.

Modric se marchó lesionado y el Madrid empezó a cojear. Se apagó la luz de las ideas, aunque Kroos mantuvo el tipo y todos lucharon con voluntad. No obstante, el Bernabéu se quejó al final con razón.

Eje de todo. Modric equilibró el 4-4-2 con subidas y bajadas a defender muy meritorias. Fue el eje de todo y dio confianza con sus pases.

Muchos huecos. Entró Illarra y el Málaga se vino arriba. Hubo muchos huecos, indecisiones y malos momentos del Madrid. James lo arregló.