No ha sido una buena temporada para Mario Suárez. Ha entrado y salido en el equipo, pero nunca dio la sensación de ser un fijo para el Cholo. Una pena porque el centrocampista tiene condiciones para ser un jugador importante. Mario puede vivir sus últimos partidos en el Atlético. A los dos les conviene una salida. El club ingresará una cantidad importante de dinero y el jugador vivirá otra experiencia profesional. Pero más allá de ello yo me quedo con lo que supone para el Atlético tener gente que se ha hecho en las categorías inferiores del club, futbolistas que saben lo que significa esta entidad, que entienden mejor que nadie el valor de ponerse esta camiseta. Y Mario es uno de ellos, pues se ha formado aquí y ha soñado ganar títulos de rojiblanco.

Como le pasa a Fernando Torres, a Gabi, a Koke, a Saúl... En un equipo es primordial tener futbolistas de la casa. En un fútbol tan profesionalizado como el de ahora y un poco carente de sentimientos, los canteranos siempre aportan un plus diferente y especial. Mario entiende que podía haber jugado más, pero respeta la decisión del entrenador. Quedan tres partidos y no es cuestión de salir mal del Atlético. Él tuvo que triunfar en otros sitios antes que en su equipo del alma para demostrar que podía ser titular y útil en el Atlético. Por eso me gustaría que si se marcha (y tiene toda la pinta de ello), lo hiciese por la puerta grande. Él ha formado parte de un equipo que nos ha dado muchas alegrías. Y eso merece nuestro reconocimiento.