Curiosidad ante el regreso de Dani Pedrosa

Dani Pedrosa vuelve por fin a la competición. Debemos celebrar que así sea, su comparecencia ante la Prensa tras el GP de Qatar, cuando anunció que se tomaría el tiempo necesario para solventar sus problemas físicos en el antebrazo derecho, sonó mucho más terrible de lo que esperamos finalmente resulte. Y me muevo en este terreno especulativo porque ahora nos queda saber el resultado efectivo de la intervención quirúrgica realizada por el doctor Villamor y en rendimiento del piloto. Lo importante, para empezar, es que ese síndrome compartimental haya pasado a la historia; a partir de ahí será cuando el catalán deba conciliarse con sus mejores sensaciones e intentar unirse al grupo de cabeza, al de los pilotos capaces de luchar por el triunfo en MotoGP.

Al respecto quiero ser optimista aunque reconozco que albergo ciertas dudas. Que el proceso de recuperación se haya prolongado más de lo previsto y el alarmismo de la espantada del piloto me invitan a ser prudente, sólo se podrá confirmar plenamente que Pedrosa ha vuelto cuando sus resultados así lo acrediten. Ya estamos viendo que la categoría reina de los grandes premios se muestra ahora más abierta que en los últimos tiempos, con Rossi a excelente nivel, Márquez siempre dando guerra, Lorenzo con ganas de afianzar sus opciones al título y las Ducati como invitadas inesperadas a esos puestos de podio. Así que el barcelonés tendrá que aplicarse para coger el ritmo… y todos cruzar los dedos deseando que su dolencia no se reproduzca. Este fin de semana en Le Mans tendremos las primeras respuestas a tantas incógnitas.