Valentino Rossi, 36 años, 9 títulos, 201 podios y 110 victorias, sigue líder del Mundial tras las cinco primeras carreras, casi el 28% del campeonato. Nadie, absolutamente nadie, excepto quizás él, podía predecir algo así. Su mérito es incuestionable (excepcional el adelantamiento a Dovizioso), pero sus rivales le están ayudando bastante. Lorenzo, con un arranque de temporada muy flojito; Pedrosa porque se ha borrado, y Márquez por las pifias de Honda. Lo de Lorenzo parece que se ha resuelto. Su carrera, como en España, ha sido sobresaliente. Ha dominado de principio a fin y ahora mismo la balanza del título se inclina a su favor. Estamos ante su mejor versión. Está ya a tan solo quince puntos de Valentino. La batalla de Mugello va a ser apasionante.

Y Márquez? Ni estuvo delante ni se le esperaba. Sufrió como un condenado para ser cuarto tras una lucha con Iannone digna de un gladiador. Pasaba una y otra vez al piloto de la Desmosedici GP15, pero luego este le rebasaba como si pilotase una Moto2. ¡Qué diferencia! Salvó dos puntos a base de osadía y de una valentía extrema. Y de una gran calidad. Qué desastre de temporada de Honda, casi a la par de la F-1. Bueno, un poco mejor. Se ha dejado la vida en cinco carreras y está a 33 puntos de Rossi. Revalidar el título se empieza a complicar. Y eso que reapareció Pedrosa, con caída incluida. Es increíble a qué velocidad se está diluyendo este gran piloto, casi tanto como el prometedor Miller. El tiempo se agota. Ya no hay margen para más errores.