Como casi siempre, es una muy buena designación la de Velasco Carballo, que, en su recta final del arbitraje, sólo le faltaba dirigir una final de Copa, como la presente, entre los dos equipos más coperos, Athletic y Barcelona. Ha dirigido encuentros importantes de Eurocopa y, recientemente, del Mundial de Brasil, con muy buenas actuaciones. Tanto es así, que estuvo entre los posibles candidatos para la final entre Alemania y Argentina. Este madrileño de 44 años y de profesión ingeniero industrial es internacional desde enero del 2008 y la próxima temporada terminará su carrera arbitral. Se trata de un colegiado serio, admite el juego fuerte y viril, pero se molesta enseguida con la mala intención actuando rápidamente en el aspecto disciplinario con las tarjetas. Tiene una buena colocación en el campo y es valiente en las áreas, aunque se pueda equivocar. Yo le catalogo como ‘árbitro halcón’, y si hay que buscarle algún defecto, diré que alguna vez he observado que da la espalda al balón y su excesiva seriedad.