La broma empieza a ser de mal gusto. Ya sabemos las pocas o nulas ganas que tiene el club de celebrar el Trofeo Bernabéu, faltando al respeto al hombre más grande que ha pisado jamás esta sagrada entidad. Aunque el año pasado la excusa de las fechas no coló (al menos para nosotros), parecía que este año iban a verse obligados a reanudar el prestigioso Trofeo al no jugar el Madrid, por desgracia, ninguna de las dos Supercopas. AS les descubrió que entre el 5 y el 15 de agosto había diez maravillosos días para fijar rival y cita en el santuario de La Castellana y poder ver un gran partido que sirviese de estreno ante la afición del nuevo proyecto de Rafa Benítez...

Pero mira por dónde, a algún lumbreras de la planta noble se le ha ocurrido que ese segundo fin de semana de agosto es mejor ocuparlo con un excitante bolo recaudatorio ante el Valerenga noruego. Imagino que Odegaard y su familia estarán encantados con el detallazo que el club ha tenido con ellos. Lástima que el Madrid no traslade sus habituales encuestas a Almansa, la cuna en la que nació Don Santiago. Allí están alucinados. Igual que en el resto de España y del Mundo, donde son legión los admiradores de Bernabéu. Aún están a tiempo de rectificar. Seguimos esperando...