El Valencia tiene su particular jeque, solo que en vez de ser árabe, es singapurense. Llamémosle magnate, justo el que Salvo quiso para “su” Valencia C.F. en estrecha colaboración con el “catedrático” e “insignia de oro y brillantes” Aurelio Martínez. Ellos dos y 17 patronos más que están más cerca de conos de entrenamiento. Al aficionado de a pié se le vendió eso. Ya no digo acabar el campo (96 o 138 kilos), liquidar la deuda con Bankia (230) o dejar la deuda del club en 28 millones en 5 años.

Eso, siendo el cuento de cenicienta que nos vendieron, no es el objeto de este comentario. Me centro en que el de bufanda y pancarta, el que se quita el dinero de vacaciones para sacarse el pase, lo que pensaba era que con Lim llegarán los fichajes de relumbrón cada año. Que se quedaría Otamendi y que vendría Jackson Martínez. “De Jackson me ocupo yo”, leía en la propaganda mediática de Salvo el verano pasado y a este se le añadió Falcao, Torres, Nani…etc. La realidad a día de hoy es que se ha fichado a los cracks que ya estaban (Rodrigo, Negredo, Enzo, por 86 millones), más André Gomes por 15, Cancelo por 15 (qué cante ¡!), Joel por 1,2. 117 millones en total. Ya están superados los 100 del préstamo de Banco Lim. ¿Bien gastados? Pero para este verano ¿qué crack viene y cuál no se va? Eso es lo que nos vendieron ¿no?