De pie cantó el mito Carlos Caszely el himno chileno en los estudios de Canal Plus, todavía sin saber que Vargas le iba a igualar minutos más tarde un récord que hasta entonces él ostentaba. Sólo Caszely había marcado dos goles en una semifinal de Copa América para Chile y, además, fue precisamente ante Perú. Por eso la sonrisa de satisfacción cuando Vargas cazó el derechazo que metía a Chile en la final soñada tras un partido tremendo, en el que a Chile se le notaron las costuras en la fase inicial.

Perú le quitó la pelota y Chile sufre sin ella. Este equipo de Sampaoli está atenazado por la responsabilidad y no mantiene mucho tiempo la presión alta. Sí que la mantiene a ráfagas, pero con la mirada en su espalda. Si el Chile-Perú es ya un clásico el partido del lunes quedará como un clásico entre los clásicos. Hubo una Perú magnífica, liderada por el hombre punta. Guerrero dio un curso de cómo aguantar el balón, él sólo sembró el pánico antes de la justa roja de Zambrano y también lo sembró después. Otros nombres. Valdivia se puso a jugar cuando Perú cedió terreno tras quedarse con diez y dio otro recital. Advincula estuvo imparable por la derecha y es otro de los jugadores que merece un salto tras esta Copa América que está jugando. Vargas marcó los dos goles y Chile jugará su final, pero para que a Alexis le encuentren primero tiene que encontrarse él a sí mismo. Por su lado, Vidal sigue con sus altibajos y los chilenos no han mejorado su fragilidad defensiva.