Más madera. Terminó el Sub-19 con España, otra vez, y van siete, reinando en Europa. Asensio luce la corona de un torneo que es algo más que cantera, un pasaporte a la gloria que está por venir. Lo cuenta un repaso a la lista de jugadores que, antes, dejaron aquí su nombre escrito. Torres, Iniesta (2002), Lloris (2005), Piqué (2006), Lars Bender (2008), Griezmann (2010)... Todos estrellas que emergieron en un Sub-19 para no apagarse ya jamás.

Del Atleti a Europa. Cuando Jacobo Ynclán tenía 19 años era uno de esos canteranos del Atleti que levantaban a la grada del Cerro del Espino con sus filigranas. Era 2003, tenía contrato hasta 2008 y le llamaban el próximo Valerón. Pero en el Calderón no encontró su sitio. Pasó por el Poli Ejido, Lleida, Bélgica y una lesión de rodilla hasta que, en 2011, cuando estaba en el Alcalá, le llamaron de Austria. “Ven a probar, 15 días”. Ya había dejado pasar el tren del Innsbruck por esperar al Cádiz, así que cogió el del Wolfsberger AC empujado por su representante. Firmó directo. Sin pruebas. Han pasado cuatro años y allí sigue. Aprendió alemán, tiene tres hijos y echa de menos el aperitivo español.

Al fin. En su primera temporada en aquella Bundesliga de diez equipos, Jacobo fue jugador revelación con 14 goles. Ahora ya lleva 29. El último, en Europa League, el pasado jueves, ante el Soligorsk bielorruso. “Mira, estaba ahí, en el túnel, y pensaba: ‘Ahora me llega la oportunidad de jugar en Europa”. Ahora, a sus 31. Si pasan, espera en tercera ronda el Dortmund. De momento, en la ida, ganaron 0-1 con ese gol de un jugador al que ya nadie llama Valerón. Él ya sólo es Jacobo. O, mejor, “el mítico Jacobo”, como le saludó Torres cuando se reencontraron en un amistoso Chelsea-WAC, tantos años después del Atleti.

Lectores. “Los futbolistas no leen”. La expresión es muy habitual. Pero es mentira. Hay quien sí y quien no, como todo en la vida. Forlán siempre iba con un Kapucinski bajo el brazo. Y Juan Mata, por ejemplo, devora Murakamis. En los vestuarios gustan mucho los libros de autoayuda. Y aquí hay un título que, aunque va de música, arrasa en EE UU dentro de este género: ‘Cosas que los nietos deberían saber’. Es la autobiografía del cantante de Eels, alguien acostumbrado también a levantar estadios, como hacía Jacobo o como hizo un chaval de apellido Iniesta en un Mundial, ocho años después de ganar un Europeo Sub-19.