El gol fue del Barça

No es tan solo una comprobación: el gol que el Barça le marcó ayer al Athletic, después de las dos tristes actuaciones anteriores de agosto, fue auténticamente un gol del Barça. Un gol entusiasta, hecho como en los tiempos más felices del equipo. Un encuentro que no tendría historia si no fuera porque lo jugaron los de Luis Enrique contra un adversario que ahora adquiere nuevas connotaciones sentimentales. En la historia reciente han sido el otro Atlético y el Real Madrid las piedras en la bota azulgrana; con una nobleza que ayer fue ensombrecida por esa tendencia a la falta, el equipo de Bilbao ha mostrado los dientes del león, y al aficionado culé ya se le ha atragantado el rojiblanco.

El partido: un Barça sin nada del otro mundo (sólo ese gol del otro mundo, además de una espectacular jugada de Messi) jugó un partido de lo peorcito, incluyendo ese penalti que Messi le dio a Gorka Iraizoz.