Piqué, Sergio Ramos y aquella foto...

La víspera de la final de la Eurocopa 2012, Sergio Ramos y Piqué se prestaron a posar en una foto para este periódico, montada por Matallanas y Vispe, sosteniendo entre ambos una bufanda con los colores de España y el rótulo de ‘La Roja’. Lo presentábamos como la presentación de un proceso de paz, tras las turbulencias de los años de Mourinho, iniciado en una conversación entre Casillas y Xavi. Madrid y Barça habían llegado a estar más enfrentados que nunca, que yo recuerde. El buen tacto y la sensatez hizo que el asunto se recondujera y que la Selección siguiera siendo un grupo unido.

Por desgracia, el ‘affaire’ Piqué se ha ido envenenando. Aquella broma de Piqué con lo de Kevin Roldán provocó pitos muy masivos en León. En Oviedo fueron menos, pero los hubo. El asunto ha ido creando un ‘souflé’ sobre el que se entrecruzan desdenes, explicaciones, exculpaciones y versiones múltiples. Esto nos llega además en un momento peor, con una parte de Cataluña arrebatada por deseos independentistas. Piqué, que hasta ahora se había quedado en pedir la consulta y en decir que ‘la gente no pita gratis, expresa su malestar y es inevitable’, se apunta ahora a Guanyarem, lo que parece un paso más allá.

Y Sergio Ramos, su compañero de foto, le ha dado más hilo a la cometa después del partido de Macedonia. Es una lástima que estos jugadores tan buenos no tengan, ni en la Federación, ni en sus clubes, quienes sepan reconducirles. Con algo más de discreción, con alguna excusa a tiempo, todo esto no estaría llegando hasta aquí. En Barcelona Piqué encuentra quienes le dicen que renuncie a la Selección, en Madrid muchos están dolidos porque Inglaterra no venga al Bernabéu para proteger de una pitada a un jugador que no repudió la que sufrieron el Himno y el Rey en el Camp Nou. Un asulto mal conducido.