Keylor, el equilibrio, Luis Suárez y Messi

¡Cómo está parando Keylor Navas! En este caso cabe bien aquello de que ‘el éxito sorprendió a la propia empresa’, dado que la propia empresa, léase Real Madrid, lo quiso expedir a Manchester hace dos meses, transformado en un cheque que abaratara el precio de De Gea. Mejor que no saliera bien aquella operación, visto lo visto. Y no lo digo por hacer de menos a De Gea, buen portero, sino porque me parece que lo que Keylor ha hecho desde que empezó la Liga sólo es comparable con las mejores rachas de Casillas. Le ha quitado al Madrid, y a Benítez, bastantes pesares.

El Madrid puede blasonar con verdad de que lleva encajados muy pocos goles, pero deducir eso de un supuesto equilibrio en el juego me parece temerario. Como tituló Trueba su crónica de ayer, como repetimos hoy en portada, el equilibrio es Keylor, que reduce el peligro de los ataques que recibe gracias a sus paradas. En Vigo hizo varias excepcionales, alguna de ellas a quemarropa, y en definitiva fue el principal causante de que el Madrid saliera victorioso de un campo difícil, en el que se presentó con muchas bajas y poco descanso, sólo dos días y medio después de jugar en París.

Ayer, Luis Suárez, con sus tres goles, sacó un partido que al Barça se le complicaba ante el Éibar. También el Barça tiene bajas, entre ellas la muy fundamental de Messi. En este caso no fue el portero, que no resultó tan exigido, sino el delantero centro quien salvó la situación. Portero en el Madrid, delantero centro en el Barça. Dos viejas posiciones que aún resultan especiales, porque les corresponde aparecer en los únicos trances realmente decisivos del fútbol, los que tienen que ver con la inminencia del gol. Keylor y Luis Suárez van salvando los puntos, mientras aparece el equilibrio o vuelve Messi.