Las peñas, el tesoro del Atlético

Siguen siendo el gran tesoro del Atlético. Son la piedra filosofal del cholismo y con esta gente se puede ir al fin del mundo. Lo que menos importancia tiene son los títulos. Lo trascendental es que se sienten identificados con un equipo que se deja el alma y que valora lo bonito por encima del resultado. El Día de las Peñas en el Calderón es algo diferente. Nunca se piensa en lo que puede dar de sí el encuentro, lo fundamental es sentarse y vivir unas horas con personas que llevan tu mismo corazón.

Los atléticos somos una congregación que estamos guiados por el espectáculo y la alegría. La delantera de seda, la invención del contragolpe de Marcel Domingo con Ufarte, Luis y Gárate o la saga de delanteros irrepetibles de la altura de Forlán, Kun Agüero o Falcao lo valoramos más que los dos accidentes que sufrimos en Bruselas y Lisboa. La prueba de la fidelidad fueron los dos años del infierno, en donde se batieron récords de asistencia y de socios. “Nunca caminarás solo”, el slogan del Liverpool, tiene en la gente colchonera a sus más fieles devotos. Y así se puede aspirar a todo.