Jugará Kiko Casilla en plaza grande. El Sevilla va a apretar, ya que a pesar de no ir muy allá en la tabla (11º), los números en el Pizjuán hablan de un equipo que sale a más de dos goles por partido, con cenit en la victoria sobre el Barça por 2-1. Datos que anuncian un examen de grado para el sustituto de Keylor, después de debutar ante Las Palmas con la mala fortuna de recibir un gol en el Bernabéu. El primero del equipo blanco en la temporada en casa. Casilla no tendrá un día templado como ante los canarios, ni mucho menos.

La buena noticia para el portero madridista es que la defensa blanca es consistente a domicilio, amparada, sobre todo, por el estado de gracia de Keylor Navas. Casilla se encontrará bajo la fuerte presión de rendir a la altura del costarricense, más allá de la natural tensión que provocará verse frente a frente con un Sevilla seguramente agresivo en ataque, azuzado por la necesidad de los puntos. Va a tener mucho trabajo Casilla y es probable que el resultado que coseche el Madrid empiece a fraguarse a partir de su actuación, pues visto está que en los últimos partidos importantes el equipo se sostuvo por la inspiración de Keylor.