El Madrid llega a Ipurua con el susto en el cuerpo de Lviv. Encajar tres goles en catorce minutos pone en tela de juicio a la defensa, una línea que hoy va a sufrir mucho ante el Eibar. El muro madridista se derrumbó de forma impactante frente al Shakhtar, dejando una inquietante imagen de desorden y debilidad. No ocurrió por relajación al llegar al 0-4, sino por un claro desajuste entre la medular y los cuatro de atrás. Ahí Casemiro se vio desbordado, cuando hasta el minuto 74 había sido un gigante.

Si el Madrid no se junta con firmeza en Ipurua, con Pepe y Nacho imponiendo jerarquía, el Eibar hará daño a Keylor. Los ocho goles a favor de los ‘armeros’ en su campo anuncian mucho juego en el área madridista, buscando a Borja Bastón (buen delantero). Los centros desde los lados van a ser continuos, los robos de balón en la medular serán el arranque de los ataques en un campo no muy grande, la presión de la grada se siente encima... Factores que obligarán al Madrid a mantener un gran nivel defensivo, en el que una vez más Casemiro está llamado a ser imprescindible, para evitar el ‘susto de Lviv’.