Doncic toma la alternativa

Igual que se recuerda el día que un desconocido Llull salió ante Toronto y revolucionó el partido, con el tiempo se recordará el de ayer, el de Doncic en Bilbao. Laso le entregó la dirección del equipo cuando perdía 27-21. Como compañeros tenía a Carroll, Taylor, Nocioni y Ayón. No se lo puso fácil. Hombres con una edad media de 31 años, de vuelta de todo, tras haber pasado por media NBA: Charlotte, Chicago, Philadelphia, Sacramento, Nueva Orleans, Orlando y Milwaukee. Doncic sólo tiene 16 años. Él les tenía que hacer funcionar. Era un cinco inédito. Un cinco sin españoles. Y con el temor de que el equipo comenzara a arrastrarse por la Liga, como lo hace por la Euroliga. Enfrente, un rival menor, pero con trapío, puro santacoloma, le ridiculizaba.

Doncic se puso a repartir asistencias. Y Carroll a meter triples. Para rematar, Doncic anotó 7 puntos. Consecutivos. Los dos últimos, de mate. Del 27-21 se pasó al 30-36. Comienza la segunda parte, y Laso no le saca. Toca rotar. O quizá no vaya a permitir que un jugador le gane el partido, dicho del baloncesto basado en la experiencia. El encuentro se vuelve a trabar. Hasta que la cuarta falta del Chacho saca a Doncic del banquillo. Con él, y otra vez Carroll, el Madrid vuelve a meter más de 30 puntos en el último cuarto. Puro espectáculo. También hay que rendirse ante el Bilbao. Cayó como un bravo. Sin abrir la boca. Mumbrú, 36 minutos, y Hannah y Bogris, cinco faltas. Su mala suerte fue encontrarse a Doncic el día que tomó la alternativa.