P. P. San Martín

James y Modric llegaron tarde al partido

Benítez decidió tirar de Casemiro para apuntalar a los centrales, pero no renunció a la BBC. Sobraba uno y fue Kroos el sacrificado. Ocurrió lo peor para el Madrid: el Villarreal se hizo grande en la medular, robando balón, presionando, apretando como en este equipo se espera y llegó el gol, en pleno desconcierto blanco. Ni Casemiro sabía sacar el balón, ni Modric se enteraba de la temperatura del partido ni James asumía responsabilidad. Además, Bale, Benzema y Cristiano estaban en ‘su’ inocua guerra (cinco disparos en toda la primera parte).

La aplastante sensación de dominio amarillo acabó tras el descanso, cuando James y Modric despertaron en El Madrigal y se pusieron a jugar por delante de Casemiro, cuando Marcelo ganó la banda y la BBC pisó más el área. El Madrid mereció marcar goles, sin duda, dominó, movió balón más rápido y tuvo ocasiones (trece remates). Benítez pagó por una fatal primera parte.

El gran agujero. Casemiro no tenía referencia por delante, Modric y James ‘devorados’ por la presión rival. Ramos lanzando largo... Mal arranque.

Rectificación. James sobre todo y también Modric despertaron y abrieron bandas a Marcelo y Danilo. Llegó el dominio, pero la BBC estaba seca.