Un Europeo con premio doble

Nuestra Selección de balonmano disputa el Europeo. En Breslavia, Wroclaw en polaco, cuyo nombre nos será más familiar por el equipo de fútbol con el que se han enfrentado en ocasiones equipos españoles, o por haberse jugado allí partidos de la Eurocopa de 2012. Ya hemos ganado a Alemania y nos queda Eslovenia (mañana) y Suecia (el miércoles). ¡Vaya grupito! ¡Ni una sola cenicienta!. Es el único grupo en el que todas las selecciones han sido medallistas en unos Europeos. Hay que quedar entre las tres primeras para pasar de fase y disputar una segunda liguilla. Después, ser campeón de Europa para asegurarse ir a los Juegos Olímpicos. De lo contrario habría que ganarse la plaza para Río en el torneo Preolímpico.

Es un camino lleno de obstáculos. Pero el balonmano es así. El mejor balonmano del mundo está en Europa y hay al menos una decena de equipos capacitados para ser campeones. Todos los que han subido al podio de los Europeos. Como entre ellos están los Hispanos, y nada menos que en cinco ocasiones, sólo una menos que Dinamarca, el problema también es para los rivales. “Vamos a afrontar cada partido como una final”, dijo Entrerríos, el capitán, lo cual define la mentalización con la que compiten nuestros jugadores. En este Campeonato el premio es doble: título y Juegos. Por esa razón todos los partidos son auténticas finales. La victoria quizá elimine, además, a rivales directos en Río. ¡A por ellos! Alemania ya ha caído.