El dilema de Florentino: cómo repartir su cariño entre Cristiano y Bale

Never, never, never. Decía Florentino en France Football que no le sorprende el interés del PSG en Cristiano. “Es el mejor jugador del mundo y el líder del Real Madrid”. Vamos, que never, never, never será vendido, ni siquiera para sacar pasta para que venga Lewandowski, que no se moverá por menos de 100 millones (es curioso que sea el PSG quien azuza su precio cuando suspira por CR7). Pero el discurso público del presidente es muy distinto al que suele tener en petit comité, donde pondera, con mucho, la figura de Bale sobre la del portugués.

Cristiano vs Bale. Acudió Florentino hace ya unas fechas a un acto público de un medio de comunicación generalista. Lo hizo en calidad de presidente de ACS, no del Madrid. Pero cuando Florentino va a cualquier acto como presidente de ACS a la gente que le rodea lo que de verdad le interesa es el Madrid. Obvio, aquí y en la China Popular. Y un invitado perdió la vergüenza: “¡No puede vender usted a Cristiano, es el mejor del Madrid!”. La respuesta de Florentino fue sorprendente: “Sí, pero Bale mete las faltas y Cristiano no...”. El invitado insistió con Cristiano. Florentino lo zanjó con un “¡bah!”, y se fue.

El médico croata. Sin un director deportivo, las recomendaciones para fichar jugadores en el Madrid pueden venir de los sitios más insospechados. El mismo día que Kovacic era presentado, justo después de decir en un corrillo de periodistas que Modric le había asegurado que el nuevo fichaje sería Balón de Oro en un par de años, Florentino también desveló que la operación estaba avalada por una persona muy singular. ¡Por su médico personal, que también es croata! “Presi, no se equivoca usted, es buenísimo”, debió decir el galeno en algún momento de la auscultación.

El médico Olmo. Hablando de doctores, sorprendió que Sergio Ramos no pudiera jugar ante el Betis por unas molestias en el gemelo que arrastra desde principios de año. También que Bale cayera otra vez lesionado en el sóleo, y es ya la tercera dolencia de esta temporada en esa parte de su musculatura aunque esta vez cambiara de pierna (la sexta desde que llegó al Madrid). Pero ya nadie escuchará una queja de un jugador hacia el doctor Olmo, jefe de los servicios médicos. El presidente llegó a un pacto con los futbolistas: dejen de hacer ruido con el tema y la situación con él será replanteada en verano, cuando termine la temporada. Parece que en el futuro habrá más cambios en el departamento médico de la entidad blanca.