El ‘minino’ se ha hecho mayor...

No deja de ser paradójico que en el año más polémico en su vida personal Benzema esté dando su mejor versión desde que Florentino Pérez se plantó en su casa de Lyon para nombrarle su delantero de cámara. A su conocida versión para asociarse, mejorar el nivel de sus compañeros y ser mejor pasador que matador, ha sumado una facilidad tremenda para marcar goles en lo que llevamos de curso. Además, la llegada de Zidane al banquillo le ha dado un plus de confianza y eso se nota en cada partido. Benzema está en deuda con un club que le ha respaldado siempre y sin condiciones, aunque a veces el chaval no ha estado a la altura de la camiseta que defiende.

Se le han pasado por alto errores que a cualquier otro le habrían costado salir por la puerta de atrás y el chico parece empeñado en mostrar su gratitud con goles y buen fútbol. Físicamente está como un pincel y ha dejado atrás ese aspecto despistado que le hacía parecer mucho peor futbolista de lo que en realidad es. En el campo está cumpliendo sobradamente, ahora sólo falta que sea capaz de entender que cuando uno es futbolista del Madrid está de guardia 24 horas al día y hay despistes que no son admisibles. Y entonces ya estaremos hablando de verdad de un delantero de época en el Madrid.