Del Bosque y la opinión pública

La presión que históricamente han sentido los seleccionadores españoles afortunadamente no la ha sentido apenas Vicente del Bosque. Desde Santamaría a Clemente, pasando por Muñoz y Suárez, sin olvidar a Iñaki Sáez y Luis Aragonés. Siempre hubo presiones. Pero el formidable triunfo de España en el Mundial 2010 y la obtención de la segunda Eurocopa consecutiva en 2012 provocaron un respeto merecido y reverencial hacia el seleccionador que se mantuvo pese al desastre de Curitiba tras caer eliminados en la primera fase del Mundial de Brasil. La Roja se rehizo de un desencanto inesperado y se clasificó de nuevo con contundencia para la Euro2016 de Francia. En los últimos partidos de clasificación la Selección volvió a jugar muy bien, recuperando su estilo. Aún así, se palpa en la opinión pública futbolística y futbolera que el nivel de exigencia hacia Del Bosque ha aumentado. El seleccionador respeta todas las opiniones, pero no le sientan bien las peticiones populares.

La coincidencia generalizada en la opinión de periodistas y aficionados de que Aduriz debe estar en la lista definitiva de la Eurocopa mientras Diego Costa debe quedarse fuera, por su última expulsión tras el chupetón a Barry, incomoda al técnico salmantino. Se le nota. Pero Vicente respeta a la opinión pública futbolística y futbolera y entiende la presión que conlleva su cargo. Pero quien decide es él y no será permeable a las presiones de nadie para convocar a uno o dejar fuera a otro. Intentará acertar y ser justo.