Italia, sólo te falta el gol

Conte aprobó con nota su examen de español. Nos mostró la Italia que se le pedía: un equipo ordenado, con garra, 'italiano' atrás y con pegada arriba. Su único límite fue volver a padecer esa maldita falta de puntería que en 2015 fue una enfermedad constante, aunque con Eder (que en el Inter todavía no marcó ni un gol) y Pellé (que en el Southampton acaba de salir de una sequía de casi cuatro meses) de titulares, casi se veía venir.

Una pena, porque el bonito juego de la Azzurra merecía seguramente mucho más: en la reanudación, Bernardeschi y sobre todo un fantástico Lorenzo Insigne, dieron más brillo a la delantera del Bel Paese. El napolitano, que en este curso, con Sarri, marcó 12 goles y firmó 11 asistencias, encandiló al Friuli con un tanto y unas jugadas que hacen inexplicable su suplencia. Italia, que hubiera merecido mucho más que un empate (más considerando que el gol de España fue ilegal) tiene que apostar por su calidad para resolver ese problema que se llama “gol”, que en el fútbol no es exactamente un detalle. Eso lo sabe el mismo Conte que ayer, tras el partido, dijo que el resultado no le gustó porque él “siempre quiere ganar”. Para esperar poder hacerlo en Francia solo tocará ajustar la puntería. Todo lo demás funciona cada vez mejor.