Nadal ya no gana. Alonso lo tiene más difícil; Gasol tampoco depende de sí mismo. Los tres españoles que han marcado una época en el deporte español, la más gloriosa de su historia, dejan paso a los nuevos campeones. Son más jóvenes, menos famosos, pero en sus deportes tan números uno, sino más, que el fabuloso trío Nadal-Alonso-Gasol. Campeones, además, contrastados porque han repetido título. Primero llegaron a la cima; después se mantuvieron, lo cual, a decir de los expertos, es más difícil. Siendo campeón, hay que trabajar igual o más que quienes aspiran a serlo. Para eso hay que ser muy humilde y esforzado. Como, por ejemplo, Javier Fernández, desde ayer campeón del mundo de patinaje por segunda vez.

Carolina Marín también lo es en bádminton. Javier Gómez Noya, en triatlón. Miguel Ángel López no lo es en marcha, pero como si lo fuera, porque ganó el Mundial el año pasado, y el anterior, el Europeo, que son competiciones que se alternan. Mireia Belmonte tendría que estar también entre estos campeones, mas el año pasado no pudo competir en los Mundiales por una lesión. Forman un buen ramillete de campeones en deportes tan variados que hablan por sí solo de la buena estructura de nuestro deporte. Javier Fernández tendría que viajar a Estados Unidos para formarse, pero fue aquí donde dio sus primeros pasos, en los clubes madrileños Igloo y Circus Villalba, y bajo entrenadores españoles. Pues es para estar orgulloso de ello.