18 acciones defensivas. Casemiro garantizó equilibrio, control y seriedad. Así lo hizo en el Camp Nou: intervino en 18 acciones defensivas con acierto, ganó el 75% de los duelos por el balón y supo leer su función de manera impecable, de tal modo que fue una bandera a la que se unieron Ramos y Pepe en el esquema defensivo.

Expeditivo con Messi. Esperaba Zidane que Messi se iría al centro en busca de balones y allí le colocó a Casemiro para que no se sintiera cómodo. Casemiro hizo tres faltas en todo el partido, muy al principio, pero se fue asentando, tomando la medida y le ganó la partida a Messi. El argentino sólo tiró a puerta una vez (53’) con fabulosa parada de Keylor. Pero la estrella azulgrana no consiguió zafarse en términos generales de Casemiro.

Apoyo de Kroos y Modric. Casemiro ofreció, sobre todo, equilibrio entre defensa y medular. Kroos y Modric pudieron moverse con soltura subiendo a la presión, o yéndose a la banda para achicar porque sabían que detrás siempre estaría Casemiro. Rakitic cayó a sus pies, también alguna vez Iniesta... Tuvo capacidad para evitar que el Barça elaborase su tradicional fútbol de paredes en la frontal del área.

Buena salida. Aunque no es el fuerte de Casemiro, en el Camp Nou tuvo casi un 80% de pases buenos (cerca del 90% cuando eran en campo propio), lo que permitió al Madrid recuperar e iniciar jugada por pies de Casemiro con alta seguridad. Apenas se le puede anotar un error de trascendencia en un pase que pudo provocar un serio problema.

Sin precisar posesión. La intención del Madrid nunca fue la de ganar la posesión del balón, con un balance final a favor de los azulgrana del 68%. Sin ganar en este concepto, la victoria cayó del lado del Madrid por un gran trabajo de resistencia en la zona media, en el que Casemiro supo hacer con muy buen criterio los balances defensivos en apoyo de los volantes y metido por delante de los laterales. El Madrid supo sufrir.

Un paso adelante. Zidane consideraba en sus apuntes la necesidad de ir a por el Barça en su salida de balón. Kroos y Modric lo pudieron hacer más que Casemiro. Los dos primeros tocaron hasta 14 balones cada uno en campo del Barça, mientras que Casemiro no necesitó más que ocho toques. Fue más conservador atrás.

De Las Palmas al Camp Nou. Casemiro, en definitiva, va sumando minutos y presencia, siendo un fijo para Zidane, con el que nunca ha perdido. Su reciente gol ganador en Las Palmas le encumbró y el partidazo en el Camp Nou le hace indiscutible. Son ya 946 minutos en Liga, 535 en Champions y 90 en Copa.

Messi, sólo un tiro. Muy lejos del área

Los números de Messi reflejan la impotencia del Barça ante el gol: un tiro a puerta (paradón de Keylor), dos lanzamientos fuera, 23 balones perdidos... Un balance flojo en el que tuvo mucha influencia Casemiro. Como se observa en el campo térmico, Messi apenas entró en el área del Madrid y estuvo moviéndose por la zona media, echando una mano a Iniesta y Rakitic.

Momento clave. Arda por Rakitic (73’)

Con 1-1 en el marcador, Luis Enrique quitó a Rakitic para meter a Arda. Hizo un favor al Madrid pues en la medular se quedó Busquets muy solo, ya que Iniesta no bajaba, tampoco Arda y por supuesto Messi no tenía que hacerlo. Casemiro trabajó más fácil, Kroos se estiró, igual que Modric. Cristiano se encargó de liquidar el partido.