P. P. San Martín

Desafío de nivel para Casemiro

Se le presenta un desafío importante a Casemiro con el rival de esta noche. El Villarreal es de los equipos que acumulan efectivos en la zona media, con buen criterio en el manejo. Por allí estará Casemiro en permanente alerta, pues una de sus oscuras tareas es la de tapar los agujeros que dejan sus laterales y los volantes que le escoltan. Extraño sería que el pivote franquicia de Zidane no cumpliera con éxito su tarea, pues si una virtud tiene ‘Case’ es la capacidad para hacerlo fácil, con regularidad y con solvencia. Él es una de las cuatro patas que sostiene a este Madrid.

Ayer publicamos en AS que Casemiro suma 1.988 minutos jugados, lo que supone el 50% de los posibles en esta temporada. Su figura ha crecido como la espuma, su fiabilidad en la hierba es indiscutible para el míster, para sus compañeros y para el público. Es verdad que los más puristas exigen algo más de plasticidad y creatividad en un pivote del Real Madrid, pero Casemiro es funcional y hombre de equipo. El Villarreal le apretará en esta noche de cuchillos largos, en un partido de balón muy repartido. Él seguirá en lo suyo: dejar que Kroos, Modric, James y compañía hagan la orfebrería. Él está para mantener el orden.