Aquí nadie se reserva para Milán

Benjamin Franklin (político, físico y filósofo estadounidense del siglo XVIII) afirmó en cierta ocasión que “la peor decisión es la indecisión”. Un error que no va a cometer Zidane. En sus cuatro meses de muchas luces y pocas sombras el marsellés ha dejado boquiabierto, incluso, a alguno de los que apostaron por él en la planta noble del club. Deslumbra su firmeza a la hora de tomar decisiones. Normalizó el debate de la suplencia de James e Isco (en el Clásico del Camp Nou apostó al final por Jesé y Lucas Vázquez antes que por ellos...) y reconstruyó la medular en torno a Casemiro después del batacazo del derbi del Bernabéu. “No me vuelve a pasar”, debió pensar.

Por eso, que nadie espere en Coruña un once especulativo pensando en la final de Milán. Quedarían dos semanas de margen para recuperarse y, qué demonios, en Riazor se jugará el Madrid su último cartucho por esta Liga y aquí no se rinde nadie. Keylor, Carvajal y Modric han superado sus leves dolencias y parece que Bale va a forzar con tal de llegar para ayudar al equipo. Eso es compromiso. Además, el que no fallará seguro es Cristiano. El de siempre. El de los 50 goles por temporada. Y así lleva seis cursos. Y eso que decían que estaba en declive...