Sacchi, Zidane, Simeone y las cábalas

Ayer leí en AS una visión exagerada de la inminente final en Milán. Según Arrigo Sacchi, el Atlético sería un pesquero enfrentado a un portaaviones. Convengamos que tal visión es un extravío, fruto quizá de su mirada ya lejana. Sacchi tuvo muy mejores tiempos, antes de pasar por el Atlético y por el Madrid, y algo habrá que rescatar siempre de lo que él diga. Recuerdo haber visto al Madrid de la Quinta del Buitre estrellarse ante su Milán y, tiempo después, ver a aquel equipo ganar la Copa de Europa al Steaua de Bucarest en el Camp Nou. ‘Cosí si gioca soltanto nel Paradiso’ tituló ‘La Gazzetta’.

Así se juega solamente en el Paraíso’. Aquel partido del Milán en el Camp Nou fue la perfección. ¿Será posible tal cosa mañana en Milán? ¡Quién puede saberlo! El Atlético saldrá tan aplicado a su causa como siempre: la intensidad, la colocación, la lucha... Frente a eso veremos al Madrid de cada día, con su hermoso despliegue en ataque de sus tres mejores jugadores: Bale, Benzema, Cristiano... Un trío que parasita las siglas BBC. ¡Qué fuerza tiene el fútbol! Lo que fue signo del inglés mejor hablado, eje lingüístico del Imperio, la BBC, es hoy la reducción a siglas de la delantera del Real Madrid.

Mientras damos vueltas a esto, el Atlético ha aterrizado en Milán, Un día antes que el Madrid. Simeone, que es un ‘cabulero’ (tradúzcase por supersticioso, en Sudamérica respetuoso con la cábalas), está tratando de hacer todo al revés de lo que lo hizo dos años atrás en Lisboa. De ahí su rocambolesco plan de entrenamiento de estos días. con saltos de aquí para allá. Incluso ha pretendido que el Atlético vistiera de azul en la final de mañana, ya que en la de Lisboa perdió de rojiblanco. Zidane, más sereno, aterriza con el equipo hoy en Milán. Supongo que es que cuando uno maneja un portaaviones...