Buen resultado: 6-1 sobre Corea del Sur, que venía de dieciséis partidos sin perder y de nueve partidos consecutivos imbatido. Ante los rivales que fueran, con los condicionantes que se quiera. Pero 6-1 es un resultado contundente ante cualquiera, más ante quien representa, hasta cierto punto, la bandera de todos los vencidos en los partidos previos. Dos de Nolito y dos de Morata. España tiene prestigio y títulos, y bueno es que además de eso enseñe nuevos dientes. Esos nuevos dientes, faltos como estamos de Villa y Torres, son Nolito y Morata. Dos buenos delanteros, de juego elegante y con gol

España salió con un solo medio centro, Bruno. En la segunda mitad le juntó a Sergio Busquets, que evidentemente es el primero. Eso nos deja la duda, que no sé si el propio Del Bosque habrá resuelto en su interior: ¿jugaremos con un solo medio centro o con dos? Visto lo que se está viendo, el equipo, con los que están más los que se espera, se va definiendo. De Gea (luego hablo de eso); Juanfran, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; X, Sergio Busquets, Iniesta; Silva, Morata y Nolito. La X se la reparten entre Cesc, Koke y Bruno, salvo que pensemos que invade el puesto de Nolito. ¡Pero es que Nolito...!

Nolito es la sangre nueva para un ataque que aflojó desde la decandencia coincidente en el tiempo de Villa y Torres, esos dos delanterazos que no viajarán a Francia. Nolito y Morata son la mejor oferta de brillo y gol desde que se fueron aquellos. Ataque tenemos. Portería, espero que también, y ahí pienso más en De Gea. Del Bosque está ofreciendo un suave y respestuoso aterrizaje en la realidad, según merece. Del Bosque se permite esos lujos. Maneja sus tiempos y sus hombres, y tras el batacazo del Mundial ha conseguido el sosiego necesario para llegar a esta Eurocopa de nuevo con buena cara.