Momento para sacar el carácter

El Castilla vuelve a ser un funambulista al que le pilla una mala racha de viento. Tanto, que el cable parece aún más delgado que de costumbre. A diferencia del 2-1 en Murcia contra el UCAM en la anterior ronda, ahora no hay red debajo que amortigüe si se pierde el equilibrio. Serán 90 minutos que valen por 42 partidos. Si no lo levantan, a casa. Vértigo. Esta vez, la coartada del filial puede ser el partido memorable del portero ilerdense Iván Crespo durante los primeros 45 minutos. Un veterano (31 años) que empezó en el CD Tropezón y le provocó un ídem al Castilla. Pero que el equipo de Ramis no se haga trampas en el solitario, necesita dar más de sí. Ante el UCAM el veneno ingerido fue un cóctel de juego brusco mezclado con cucharadas de mucho oficio y acierto en momentos escogidos. El Lleida no fue todo aquello y aún así sacó ayer un resultado sustancioso. Ramis tiene siete días para parchear una defensa en la que no estará Álex Salto al recibir una roja esperpéntica y que ha recibido cinco goles en tres partidos de playoff: un socavón. Cuando te hacen hasta un gol de chilena sin oposición y a las primeras de cambio, es que algo pasa...

Si atrás el Castilla se evapora, en su mejor faceta, la ofensiva, vivió las estrecheces de este tipo de eliminatorias donde hay que buscarse la vida. Con Odegaard engullido por las circunstancias, Mariano (27 goles) apareció ante el UCAM con un doblete en el Di Stéfano y ahora el Castilla le necesita de nuevo. Pero aún más a Borja Mayoral (15), incisivo aunque inédito todavía en los playoff de ascenso. Es el momento de sacar su carácter y arrastrar con él al Castilla. Es tiempo de que aparezcan los líderes.